Ayer, 11 de
marzo, tuvo lugar la tercera reunión de la mesa del Convenio Colectivo de
Ahorro, en la que la Patronal ha mantenido la posición maximalista de
anteriores reuniones, que ha impedido avanzar en la negociación.
La Patronal
justifica la necesidad de la eliminación de la práctica totalidad de los
derechos que históricamente han venido regulados en nuestro Convenio,
recurriendo una serie de datos aislados que, en su opinión, vienen a mostrar
una débil recuperación del negocio (volumen de negocio, margen de intereses,
media del ROE y del ROA, la ampliación de la competencia a empresas no
financieras…), que nos indica la situación complicada en la que aún estamos.
Asimismo,
pretende demostrar que no existen motivos para incrementos salariales, ya que
al parecer, por la “magia” de los datos que presentan, no se ha producido la
congelación salarial pretendida con el anterior Convenio, sino que se ha visto
incrementado el poder adquisitivo de los trabajadores, con el consiguiente
incremento de los costes salariales en el 7,3% respecto al inicio de la crisis.
No vamos a desgastarnos en demostrar lo contrario, porque la realidad es
contundente.
Además de
los datos económicos, según la patronal existen temas laborales que justifican
su propuesta. Así, pretende que el Convenio sea coadyuvante a la
racionalización y estructuración del sector. Y para ello, cómo no! No podían
faltar las referencias a lo injustificable de cobrar la paga de beneficios y la
de productividad, de los pluses y la carrera por antigüedad que abarcan a la
totalidad de las plantillas, junto con la clasificación de oficinas.
Para terminar
de redondearlo, han planteado lo inflexible de los límites de la movilidad
geográfica, por lo que hay que modificar esta regulación que tiene más de 20
años, en los tiempos en los que los medios de transporte eran otros. Vamos! Que
desde que tenemos Ave hemos ganado una barbaridad.
Todo ello
sin olvidarse de la jornada y horarios, según sus datos nos encontramos entre
el 10% de los privilegiados de la población laboral del país. Así que la
patronal pretende que el Convenio fije el techo de la jornada pero hay que
dejar a las empresas que regule el horario que más les convenga.
En resumen,
se podría decir que, para la patronal, trabajamos poco y cobramos mucho. Y que
lo de la prolongación de jornada y el consiguiente fraude, como que no va con
ellos.
Desde UGT hemos rechazado
los argumentos planteados por la Patronal que no tienen en cuenta el sacrificio
que los últimos años hemos tenido que realizar los trabajadores del Sector de
Ahorro para afrontar una crisis que no hemos generado nosotros. Entendemos que
en la negociación del actual Convenio hay que tener en cuenta el gran esfuerzo
que vienen realizando desde hace años las plantillas.
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