Gracias a las denuncias de
UGT BMN y las consecuentes sanciones de la Inspección de Trabajo la
Gerencia reacciona y da instrucciones a sus mandos intermedios prohibiendo las
prolongaciones de jornada y el trabajo de tarde.
Las sanciones de la autoridad laboral
a BMN producen su efecto: la empresa se ve obligada a tomar medidas.
Un ERE no es compatible con las horas
negras, porque es un fraude en toda regla, a todas las instituciones: INEM,
Seguridad Social, Plantilla.
Además es un fraude a nosotros
mismos, a nuestra salud mental y física, a nuestras familias, e incluso a la
propia empresa, ya que está demostrado, que el rendimiento y la productividad
disminuye considerablemente cuando se alargan en exceso las jornadas.
El ordenamiento laboral es tajante en
esta materia, las horas trabajadas se tienen que registrar en los centros de
trabajo en el llamado “registro horario” y todas se tienen que pagar y cotizar.
UGT hace de este problema una de
nuestras preocupaciones y ocupaciones.
Nos parece estupendo que la
representación laboral se suba ahora a este carro, eso siempre nos dará fuerza
ante los abusos.
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