LOS EXPERIMENTOS CON GASEOSA
En la reunión de la Mesa Laboral del día 19 de febrero, en la que
el banco comunico un nuevo cierre de oficinas, UGT manifestó enérgicamente que los Gestores de BMN se volvían a equivocar con estos cierres ya que estas oficinas son nuestro
negocio tradicional y se contradice con las propias directrices del FROB de que
debíamos volver a ese negocio, e igual se manifestaba en el memorándum firmado
con Bruselas para la recapitalización de BMN. Esta decisión supone abandonar al
pequeño ahorrador, y nos preocupan estas decisiones ya que los que termínanos
pagándola somos los trabajadores.
No hubo entonces ni ahora
justificación alguna para la decisión del cierre de estas oficinas (la gran mayoría de ellas en
beneficios) y aunque nos digan que se cierran 12 y que el resto se convertirán
en ventanillas desplazadas con un horario reducido seguimos pensando que es un
error.
Posteriormente
desde UGT se ha manifestado esta oposición a los cierres de oficinas en conversaciones
mantenidas con altas jerarquías del banco.
Pues
bien una vez producidos los cierres, y un día después de la publicación de la
circular de nombramientos, en la cual se tenían en cuenta las oficinas que
pasaban a ventanillas desplazadas, nos
encontramos con que el banco da marcha atrás y decide no cerrar ninguna de las
oficinas que iban a pasar a ventanillas con horario reducido (cuando menos
de momento) sin que hayan dado razones para ello. En UGT nos alegramos de esta
decisión, pero tenemos que decir que la incertidumbre e inseguridad de los
empleados de estas oficinas sobre su futuro profesional y de la clientela a la
que prestan servicio, ya no es recuperable. Se ha hecho un importante daño y
alguien es responsable de ello y a alguien o a más de uno el banco les debe de
exigir responsabilidades, pues ante estos hechos la competencia se frota
las manos.
Señores mandamases del
banco, como se suele decir, los experimentos con gaseosa.
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